Se quitó la vida en la iglesia de Piedecuesta
De acuerdo con la Policía, el hombre ingresó a la Iglesia, ubicada en el parque principal de dicho municipio, y como cualquier feligrés, se sentó en una de las bancas, cerca a la imagen de la Virgen de Chiquinquirá. Estando allí, relató un testigo, el hombre cayó al piso, por lo que muchos pensaron que se trataba de un infarto. Aunque trataron de auxiliarlo, esta persona murió, por lo que dieron aviso a la Policía. Cuando los uniformados llegaron, encontraron junto al cuerpo un tarro de veneno, por lo que reportaron la situación a la Unidad Móvil del Laboratorio de Criminalística del Cuerpo Técnico de Investigación, CTI, de la Fiscalía, para que realizara la inspección del cadáver. “El ciudadano, de 37 años, se quitó la vida en esta catedral. Al parecer, ingirió un frasco de veneno. La Policía Nacional lamenta este nuevo hecho de suicidio y queremos invitar a toda la ciudadanía a que se una a todos los programas y actividades de la Policía para evitar nuevamente situaciones como estas”, indicó sobre lo ocurrido el brigadier general William Ernesto Ruiz Garzón, comandante de la Policía Metropolitana de Bucaramanga. El cuerpo sin vida del hombre fue trasladado a la morgue del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, seccional Bucaramanga, donde en las próximas horas será entregado a sus familiares. Otro caso en la Iglesia El 22 de diciembre del año 2014, fue hallado un feto dentro de una bolsa, el cual fue abandonado en una de las bancas de la iglesia San Francisco, en Piedecuesta. Tras verificar que en efecto se trataba de un feto, el sacerdote dio aviso a la Policía. Cuando los uniformados llegaron a la Iglesia, acordonaron el sitio y cerraron el templo. Funcionarios de la Unidad Móvil del Laboratorio de Criminalística del Cuerpo Técnico de Investigación, CTI, de la Fiscalía, realizaron la diligencia de levantamiento.
